El edificio
En el corazón de la ciudad histórica, a pocos metros de Trinità dei Monti, el edificio que alberga el museo es un antiguo monasterio de clausura que data de finales del siglo XVI y adyacente a la iglesia de S. Giuseppe a Capo le Case. El convento, sede de la Orden de las Carmelitas Descalzas, ya estaba documentado en 1600 en la zona denominada “alle fratte” por su posición todavía marginal con respecto a la zona habitada.
Hoy en día su fachada clara se inserta en el denso tejido urbano y concluye la subida de Via Capo le Case ofreciendo desde las ventanas una perspectiva inusual sobre la Cúpula de San Pedro y sobre las caprichosas formas barrocas del campanario de Sant'Andrea delle Fratte, de Francesco Borromini.
El complejo ha sido renovado y reformado varias veces durante el siglo XVII, y cuando tuvo su conformación más extensa y definitiva incluyó el claustro, que todavía existe, y una serie de artefactos menores extendidos hasta la parte posterior de Via Zucchelli. Pasado al Ayuntamiento de Roma en 1879 a raíz del traslado de la comunidad monástica al Colegio de San Pietro in Montorio, el convento posteriormente tuvo muchos destinos diversos- entre ellos el no menos importante por prestigio, desde 1880 hasta los años veinte, del Museo Artístico Industrial- para luego caer en una progresiva degradación.
El plan de recuperación, realizado por la Superintendencia Capitolina a principios de los noventa, ha transformado una parte de este mismo en museo, conservando en la renovación algunas características de la tipología monástica como el claustro y las antiguas cubiertas.
El pequeño jardín interior está rodeado por las alas del pórtico del claustro que acompañan a un rincón olvidado y silencioso, pero no sin encanto, de la ciudad histórica.